Los diamantes pueden definirse como uno de los minerales más deseados del mundo. La dureza y belleza de este materíal lo han convertido en una piedra preciosa única en el mundo que suele frecuentar las altas esferas. Las joyas son uno de los usos más frecuentes de un material que integra un proceso bastante complejo. Por eso desde Okdiario te vamos a mostrar todos los pasos y la definición de este precioso mineral.
¿Qué son los diamantes?
Los diamantes son átomos puros de carbono que bajo unas condiciones de temperatura y presión extremas se transforman en una piedra preciosa. Un mineral que depende de muchos factores, entre los que destacan: el color, la claridad, el corte y, por supuesto, los quilates. Además a la hora de la puesta en escena suelen incorporar una silueta poliforme que los hace aún más atractivos.
Otra de las cualidades más importantes de este material se basa en la gran capacidad que incluyen para conducir el calor. Sin olvidarnos de que, junto al grafeno, se enmarcan como los materiales más duros que existen. Algo que se debe a la rocosa unión de sus átomos de carbono. Eso sí, depende de su peso, el diamante puede tener un número u otro de quilates. Por ello puede deducirse esta afirmación: “sólo un diamante puede cortar a otro diamante”.
Formación de un diamante
Para que pueda conformarse un diamante tal y como lo conoce la gente de a pie tienen que pasar millones y hasta billones de años. Un proceso que tiene lugar en la litosfera, una capa de la Tierra que se sitúa entre los 150 y 200 kilómetros bajo tierra. Cabe destacar que esta zona se identifica por unas condiciones extremas en la que las temperaturas superan los 1.000 grados centígrados.
En este contexto y junto con la combinación de la molécula cúbica se produce la formación de este impresionante material. Eso sí, todo este proceso tiene lugar en las complejas erupciones volcánicas, cuando el magma de las zonas más profundas de la Tierra se enfría y se forman así los numerosos depósitos de sedimentos. En fin, los diamantes son unos minerales tan bellos como complejos que suelen encontrarse mayoritariamente en algunas zonas de Rusia y extensos territorios de Sudáfrica.
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